WASHINGTON.— La comunidad de Wenatchee, en el estado de Washington, se encuentra consternada tras el hallazgo de los cuerpos de Paityn, Evelyn y Olivia Decker, tres niñas de 9, 8 y 5 años respectivamente, quienes habían sido reportadas como desaparecidas el viernes pasado. Las menores fueron localizadas sin vida el lunes por la noche cerca del Rock Island Campground, con bolsas plásticas en la cabeza y muñecas atadas con cinchos, de acuerdo con documentos judiciales revelados por medios estadounidenses.
El principal sospechoso: Travis Decker
El caso ha sacudido a la opinión pública por la implicación directa del padre de las niñas, Travis Decker, de 32 años, un veterano militar en situación de calle y con antecedentes de problemas de salud mental. Decker tenía permitido convivir con sus hijas dos fines de semana al mes como parte de un acuerdo de custodia compartida.
El viernes pasado, Decker recogió a las menores como estaba previsto, pero nunca las regresó con su madre, Whitney Decker, quien tenía la custodia total. Al perder contacto con él, Whitney reportó su desaparición ante las autoridades.
Hallazgo del crimen y pruebas
El lunes, los cuerpos de las niñas fueron descubiertos cerca de un campamento rural. Vestían la misma ropa con la que fueron vistas por última vez. La policía también localizó una camioneta GMC Sierra 2017 registrada a nombre de Decker, que tenía dos huellas ensangrentadas en la parte trasera. Dentro del vehículo había mantas, comida, asientos infantiles y una billetera, lo que sugiere que las niñas estuvieron con vida al menos por un tiempo antes del crimen.
Según los forenses, las menores habrían muerto por asfixia.
Antecedentes preocupantes
De acuerdo con los documentos judiciales, Travis Decker padecía trastorno límite de la personalidad, pero no estaba siguiendo su tratamiento psicológico ni medicación, como se había estipulado en el acuerdo legal para ver a sus hijas. La madre sospechaba que Decker no estaba cumpliendo con las condiciones, lo que finalmente terminó en esta tragedia.
El mismo lunes, antes del hallazgo de los cuerpos, se giró una orden de arresto en su contra por interferencia de custodia, a la que posteriormente se sumaron tres cargos por asesinato en primer grado y secuestro en primer grado.
Operativo de búsqueda
Desde el martes, las autoridades han desplegado un amplio operativo de búsqueda, con participación de SWAT, el Departamento de Seguridad Nacional y el Servicio Forestal de EE.UU.. Travis Decker fue visto por última vez con camisa clara y pantalones cortos oscuros, mide 1.73 metros, pesa 86 kilos, tiene cabello negro y ojos marrones.
La policía advierte que podría representar un peligro considerable, por lo que cualquier persona que tenga información debe comunicarse de inmediato al 911 y no intentar acercarse.
El llamado desesperado de una madre
Horas antes del trágico descubrimiento, Whitney Decker emitió un comunicado con un llamado lleno de esperanza:
“Solo quiero que las niñas vuelvan a casa sanas y salvas, eso es lo más importante para mí. Estoy preocupada por la seguridad y el bienestar de mis hijas y de su papá. Esta es una situación inimaginable”, declaró a medios locales.
Hoy, la madre exige justicia en medio de un dolor irreparable. Las autoridades continúan buscando al veterano prófugo, cuya historia familiar se ha convertido en un símbolo del abandono institucional a personas con trastornos mentales y sin hogar.