CUAUHTÉMOC, CHIHUAHUA.– En una tragedia que ha causado conmoción en todo el estado, el pequeño David, un niño rarámuri de solo 4 años de edad, falleció luego de caer a un pozo de 120 metros de profundidad en la zona de Quinta Lupitas, en el municipio de Cuauhtémoc.
El lamentable accidente ocurrió la tarde del viernes, cuando el menor se encontraba jugando cerca de una excavación sin señalización ni medidas de seguridad. Según testigos, el hoyo se encontraba destapado y sin protección, lo que facilitó el trágico suceso.
Cinco horas de angustia y esperanza
Tras la caída, familiares y vecinos alertaron al 911, y rápidamente arribaron equipos de rescate de Protección Civil, Cruz Roja y Policía Municipal, quienes iniciaron una intensa operación para localizar al menor. Inicialmente, el niño respondió a los llamados, lo que mantuvo viva la esperanza de rescatarlo con vida. Sin embargo, con el paso de las horas dejó de emitir señales.
Cerca de cinco horas después, rescatistas lograron recuperar el cuerpo sin vida del menor. Autoridades municipales confirmaron su deceso y entregaron el cuerpo a sus familiares para los trámites correspondientes.
Exigen justicia y seguridad
El trágico fallecimiento ha reavivado el debate sobre la negligencia en obras de excavación y la falta de supervisión en zonas habitadas. Pobladores y organizaciones sociales han exigido a las autoridades investigar y sancionar a los responsables por no haber tomado las medidas de protección necesarias.
Las autoridades locales han informado que ya se abrió una carpeta de investigación para determinar si hubo omisión de seguridad por parte de quienes realizaron los trabajos de excavación.
