Chihuahua, Chih.– Una tormenta de arena de gran magnitud azotó este sábado varias zonas del estado, incluyendo la ciudad de Chihuahua y el municipio de Aldama, provocando afectaciones en carreteras, incendios y caos en distintos puntos de la región.
Según reportes oficiales, el fenómeno se originó en Samalayuca y avanzó rápidamente hacia la capital, impulsado por intensas ráfagas de viento. La nube de polvo alcanzó tal altura que superó incluso los cerros de la Sierra de Nombre de Dios, sorprendiendo a quienes transitaban por la carretera Aldama-Chihuahua.
Ante la reducción drástica de visibilidad y el riesgo de accidentes, Protección Civil ordenó el cierre total de la carretera Ojinaga-Aldama, mientras distintas corporaciones permanecen en alerta en otros tramos afectados.
Además, el viento y el polvo generaron un incendio en el relleno sanitario municipal, lo que movilizó a cuerpos de bomberos, policías y personal de emergencia para sofocar el fuego y evitar su propagación.
Hasta el momento, no se reportan personas lesionadas, pero las autoridades exhortaron a la población a extremar precauciones, evitar salir de casa, cerrar puertas y ventanas, y protegerse del polvo para prevenir enfermedades respiratorias.
