CULIACÁN, SINALOA.– La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó el hallazgo de ocho personas asesinadas en diferentes municipios de Sinaloa durante el lunes 9 de junio, en medio de una escalada de violencia que sacude a la entidad desde la ruptura entre facciones del Cártel de Sinaloa.
Ese día, se iniciaron siete carpetas de investigación por homicidio doloso, mientras que también se reportaron 19 robos de vehículos y un caso de privación ilegal de la libertad en el municipio de Culiacán.
Múltiples asesinatos en Culiacán, Elota, Mocorito y Mazatlán
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En Culiacán, se registraron cuatro homicidios:
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Dos cuerpos fueron hallados en el Campo El Diez.
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Otro en la colonia Real del Parque.
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Una víctima más falleció en la Cruz Roja tras ser herida en la Maxipista Culiacán-Mazatlán, cerca de La Cruz de Elota.
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En Mocorito, al norte del estado, se localizaron tres personas asesinadas:
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Dos en La Guamuchilera.
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Una más en Juan Escutia II.
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En Mazatlán, otra persona murió en el Hospital IMSS Bienestar de la colonia El Venadillo.
Escalada de violencia por fractura en el Cártel de Sinaloa
Desde el 9 de septiembre de 2024, la zona centro y sur de Sinaloa se ha convertido en epicentro de un conflicto armado interno entre las facciones de Los Chapitos y La Mayiza, consecuencia de una traición interna que marcó una nueva etapa de inestabilidad.
El 25 de julio de 2024, Ismael “El Mayo” Zambada fue supuestamente entregado a EE.UU. por Joaquín Guzmán López, lo que detonó una ola de asesinatos, ataques armados y ejecuciones, recordando viejos conflictos como la guerra con los Beltrán Leyva en 2008 y el enfrentamiento con Los Dámaso en 2016.
Ese mismo día también fue asesinado Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder del Partido Sinaloense, agudizando la crisis política en la entidad.
Inseguridad generalizada
Además de los homicidios, la Fiscalía estatal informó:
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19 denuncias por robo de vehículos.
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Una denuncia formal por desaparición forzada en Culiacán.
La ola de violencia sigue afectando Culiacán, Elota, Eldorado, Cosalá, Mazatlán y comunidades rurales, sin una solución clara mientras las autoridades enfrentan una fractura criminal sin precedentes.