El hecho quedó grabado en video y generó indignación en Oaxaca; el ayuntamiento abrió una investigación
Salina Cruz, Oaxaca.– Un nuevo caso de abuso policial quedó al descubierto en el Istmo de Tehuantepec luego de que vecinos grabaran el momento en que una mujer policía municipal golpea a una detenida mientras esta ya se encontraba dentro de una patrulla. El video, difundido ampliamente en redes sociales, generó indignación y llevó a la suspensión de la agente implicada.
El hecho captado en video
De acuerdo con El Universal Oaxaca, los hechos ocurrieron en la colonia San Pablo Sur tras un reporte ciudadano al 911. Según la versión oficial, la detenida había sido acusada por su propia hija de atacarla con un arma blanca.
En las imágenes se aprecia cómo, pese a que la mujer no opuso resistencia, una agente la golpea y patea en repetidas ocasiones. Testigos grabaron la escena e incluso reclamaron a los oficiales:
“No le pegues, por qué le estás pegando, si la señora está tranquila, se está subiendo”, se escucha en el video.
La patrulla involucrada fue identificada con placas RY-4821-A. De acuerdo con vecinos, los policías se retiraron rápidamente al percatarse de que estaban siendo filmados.
Reacción del ayuntamiento
El Gobierno Municipal de Salina Cruz emitió un comunicado en el que condenó el abuso de autoridad y confirmó la suspensión temporal de la oficial mientras el caso es revisado por el Consejo de Honor y Justicia.
“La elemento será suspendida temporalmente mientras se realizan las investigaciones (…) Se actuará con apego a derecho y se dará a conocer a la ciudadanía la resolución”, indicó el documento oficial.
Antecedentes que reavivan la indignación
El caso ha traído a la memoria el de Abigail Hay Urrutia, joven que murió bajo custodia de la Policía Municipal de Salina Cruz en 2022. Mientras la versión oficial aseguró que se trató de un suicidio, la familia denunció que fue asesinada dentro de los separos policiales.
Organizaciones civiles y ciudadanos señalaron que estos incidentes evidencian la persistencia de abusos policiales en la región, lo que refuerza la exigencia de protocolos más estrictos y sanciones ejemplares.