El crimen conmociona a Baja California; la menor fue decapitada y desmembrada
SAN QUINTÍN, BAJA CALIFORNIA.— En uno de los casos más impactantes del año, un adolescente confesó haber asesinado a la niña Keila Nicole, de tan solo 13 años, inspirándose en la serie estadounidense “Dexter”, la cual relata la historia de un asesino serial ficticio. La Fiscalía General del Estado confirmó que el joven planeó meticulosamente el crimen, el cual incluyó decapitación y desmembramiento.
“Dexter me dio la idea”, declaró el agresor
De acuerdo con María Elena Andrade, fiscal general del estado, el adolescente justificó el feminicidio asegurando que fue la serie de televisión la que le plantó la idea. Durante las entrevistas, el joven detalló cómo planeó la ejecución, incluso el desmembramiento del cuerpo de Keila.
“Ni la propia autoridad lográbamos explicar el móvil del crimen… No encontrábamos el más mínimo motivo para que alguien actuara así contra una niña”, señaló la fiscal en conferencia de prensa.
El crimen ocurrió el pasado 1 de julio, en una zona montañosa del poblado El Rosario, al sur de San Quintín, a unos 360 kilómetros de Tijuana. Los restos de la menor fueron localizados ese mismo día, aunque algunas partes del cuerpo aún no han sido encontradas.
“Tengo miedo, lo veo raro”, dijo Keila antes de morir
Keila le había dicho a su familia que iría con amigas, pero en realidad se reunió con el adolescente. Antes de ser asesinada, alcanzó a enviar un mensaje de texto a una amiga:
“Tengo miedo, lo veo muy raro”.
Ese mensaje fue la última señal de vida que se tuvo de ella.
Golpeada, asesinada y mutilada
La fiscal Andrade relató que Keila se sentó debajo de un árbol, momento en el que el agresor la golpeó en la cabeza para iniciar el ataque. Fue detenida por el delito de feminicidio agravado, y está pendiente que un juez dicte la vinculación a proceso.
La familia de la niña reportó su desaparición solo dos horas después de que salió de casa. Fue en ese momento cuando supieron que nunca llegó con las amigas como había dicho.
La violencia infantil en aumento
El caso ha desatado una ola de indignación nacional, especialmente por la crueldad del crimen y la inspiración mediática detrás del feminicidio. Organizaciones de derechos humanos y colectivos feministas han exigido mayor regulación de contenidos violentos y atención especializada a menores con conductas antisociales.