Lima, Perú.– Mientras un sismo de magnitud 6.1 sacudía Lima la mañana del domingo, una pastora evangélica y su congregación transformaron el evento natural en un acto de fervor religioso, desatando una fuerte ola de reacciones en redes sociales.
En el templo evangélico “El Gran Yo Soy”, ubicado en el distrito de San Martín de Porres, la pastora Nélida Rojas interrumpió su prédica para exclamar con los brazos al cielo:
“¡Más fuerte, Padre, más fuerte, aleluya! ¡Eso significa que nuestro Padre Celestial está obrando! ¡No se asusten!”
Nadie evacuó; el culto siguió entre gritos de fe
El movimiento telúrico, con epicentro a 30 kilómetros al suroeste del Callao y una profundidad de 49 km, se sintió con fuerza en todo Lima. Sin embargo, en el templo nadie se movió: los fieles permanecieron en sus asientos, algunos aplaudiendo, otros alzando las manos, y algunos visiblemente confundidos.
Todo fue captado en video y transmitido en redes por asistentes que planeaban grabar un culto común. Lo que siguió fue una ola de viralidad que dividió opiniones.
Redes divididas: ¿acto de fe o irresponsabilidad?
Mientras algunos usuarios aplaudieron el valor y la fe inquebrantable de la pastora, otros calificaron su actitud como temeraria y peligrosa, al no aplicar protocolos de evacuación en plena zona sísmica.
“Una cosa es confiar en Dios y otra jugar con la vida de la gente”, escribió un usuario.
“La única iglesia que aplaude un sismo en vez de evacuar”, ironizó otro.
Aunque no se registraron víctimas fatales, sí hubo daños menores en zonas del Cono Norte, donde se encuentra el templo.
“El Señor habla a través de los hechos”
La iglesia “El Gran Yo Soy” es conocida por sus cultos emotivos, con énfasis en la oración, la liberación espiritual y las señales divinas. La pastora Rojas, con estilo directo y encendido, ha construido una sólida comunidad de fieles bajo el mensaje: “El Señor habla a través de los hechos”.