Ciudad Juárez, Chih. – A más de dos meses del brutal ataque que sufrió, Leticia Guzmán continúa luchando por su vida en un hospital del IMSS, mientras que su agresor enfrenta un proceso penal por intento de feminicidio agravado y violación.
El hecho ocurrió el 10 de marzo de 2025, cuando Leticia acudió al domicilio de su agresor en la colonia Torres del PRI, con la intención de comprar un microondas, pero fue sometida, asfixiada, rociada con combustible e incendiada.
Declaración anticipada desde el hospital
Debido al grave estado de salud de la víctima, el lunes se realizó una audiencia de prueba anticipada bajo la causa penal 1420/25, en la que Leticia rindió su declaración ante la jueza, desde su cama hospitalaria. La diligencia fue solicitada con base en el Código Nacional de Procedimientos Penales, ante el riesgo de muerte o daño neurológico permanente que enfrenta la víctima.
Sara Isabel Ortiz Contreras, abogada y asesora jurídica de Leticia, explicó que la víctima ratificó su testimonio anterior, identificando nuevamente a su agresor y detallando los hechos ocurridos la noche del ataque.
“Había sido engañada por el presunto responsable, en que iba a ser la venta de un artefacto, un microondas, y fue cuando la lesionó, la ahorcó, quemó y terminó en violación”, señaló Ortiz.
Buscan 40 años de cárcel y señalan a otro implicado
La representante legal aseguró que el objetivo es obtener una sentencia mínima de 40 años de prisión para el presunto agresor, José Luis Q. C., quien fue detenido en el estado de Oaxaca semanas después del crimen, gracias a la colaboración entre las fiscalías de Chihuahua y Oaxaca.
Además, se abrió una nueva carpeta de investigación contra un segundo sujeto, acusado de omisión de auxilio, pues se encontraba presente durante el ataque y, aunque aseguró haber brindado ayuda, su testimonio contradice las evidencias recabadas.
Leticia sigue hospitalizada y en estado delicado
Leticia se encuentra internada en el IMSS, bajo tratamiento intensivo por quemaduras de segundo y tercer grado, además de presentar infecciones graves y complicaciones por su condición de salud, incluyendo diabetes.
El caso ha generado indignación pública y ha sido clasificado como feminicidio en grado de tentativa con agravantes. La comunidad y diversas organizaciones feministas han pedido justicia pronta y castigo ejemplar para los responsables.