El descubrimiento se dio tras un reporte ciudadano por olores fétidos; el crematorio operaba en la colonia Granjas Polo Gamboa
Ciudad Juárez.– Un total de 383 cuerpos fueron localizados al interior de un crematorio ubicado en la colonia Granjas Polo Gamboa, al sur de Ciudad Juárez, confirmó oficialmente el fiscal general del Estado de Chihuahua, César Jáuregui Moreno, durante una entrevista telefónica con el canal 44. El hecho ha provocado conmoción nacional por la magnitud del hallazgo y la incertidumbre sobre las causas detrás de la acumulación de cadáveres.
Todo comenzó con un reporte por olores fétidos
La noche del jueves 27 de junio de 2025, un residente del sector reportó olores nauseabundos provenientes de un inmueble y observó un cuerpo dentro de un vehículo estacionado en el lugar, lo que motivó una alerta al número de emergencias.
Debido a la hora y a las condiciones de lluvia que azotaban la zona, los trabajos forenses iniciaron formalmente hasta la mañana del viernes 28 de junio. Al ingresar al inmueble, las autoridades quedaron sorprendidas por la cantidad de cadáveres encontrados, muchos de ellos almacenados en condiciones que hasta ahora siguen bajo análisis.
Primeras declaraciones oficiales
Inicialmente, el fiscal general César Jáuregui declaró que se trataba de “decenas de cuerpos”, aunque evitó dar una cifra definitiva en ese momento. Horas después, el fiscal de la Zona Norte, Carlos Manuel Salas, informó que se tenía un conteo preliminar de 60 cuerpos.
Ambos funcionarios coincidieron en que no se podía configurar legalmente el delito de inhumación clandestina, ya que los cuerpos estaban embalsamados, no enterrados. No obstante, sí se abrió una línea de investigación por presunto fraude, ya que diversas funerarias podrían haber cobrado por un servicio de cremación que nunca se realizó.
“La ley penal señala la inhumación clandestina. No estamos en presencia de eso, pero estamos haciendo esa revisión. Aquí se trata fundamentalmente de la no prestación de un servicio que contrató la gente”, explicó Jáuregui en entrevista.
Confirmados: 383 cuerpos embalsamados
Luego de dos días de trabajos forenses intensos en el inmueble, la Fiscalía General del Estado de Chihuahua confirmó oficialmente en voz del fiscal César Jáuregui, que el conteo final de cuerpos es de 383.
La mayoría de los cadáveres estaban embalsamados, lo que ha permitido su conservación, aunque no hay claridad sobre cuánto tiempo llevaban en el lugar ni si contaban con documentación o etiquetas de identificación correspondientes.
Posibles delitos: fraude y omisión de servicio
Si bien el caso no se tipifica como inhumación clandestina, la Fiscalía analiza responsabilidad penal por omisión de servicio, fraude y abuso de confianza, especialmente por parte de funerarias que habrían contratado el crematorio para disponer de cuerpos, sin cumplir con el proceso correspondiente.
La principal hipótesis es que el crematorio colapsó por saturación de servicio o falta de recursos, y comenzó a almacenar los cuerpos sin autorización ni control sanitario, mientras seguía cobrando por supuestos procedimientos de cremación.
“Podrían presentarse muchas denuncias por fraude o incumplimiento de contrato, dependiendo de cuántas familias estén afectadas”, puntualizó Jáuregui.
El crematorio prestaba servicio a varias funerarias
Las investigaciones apuntan a que este crematorio prestaba servicio a múltiples funerarias locales, operando como proveedor de cremaciones subcontratadas. Esto significa que algunas funerarias probablemente cobraban a los deudos por un servicio que no se cumplió, lo cual agrava el impacto del caso.
Ahora, los fiscales buscan determinar cuántas funerarias están involucradas, cuál fue su grado de responsabilidad y si hubo colusión, negligencia o encubrimiento.
Indignación de la sociedad y familias en incertidumbre
Desde que se dio a conocer el hallazgo, decenas de familias se han presentado a las instalaciones del Semefo y a la Fiscalía Zona Norte para preguntar si alguno de los cuerpos pudiera corresponder a sus seres queridos.
Colectivos de búsqueda de personas desaparecidas también han solicitado acceso a la información, ante la posibilidad de que alguno de los cuerpos no haya sido embalsamado por causas naturales.
Las redes sociales se han llenado de expresiones de indignación, incredulidad y dolor, con mensajes como: “¿Cómo es posible que haya casi 400 cuerpos y nadie haya hecho nada antes?”, o “¿A cuántas familias se les mintió?”.
Exigen auditoría y sanciones
Ciudadanos, activistas y regidores locales han exigido una auditoría integral al funcionamiento del crematorio, así como la fiscalización de funerarias y centros de disposición final de cadáveres. Algunos incluso piden que se impulse una reforma para endurecer los controles sanitarios y legales en este tipo de establecimientos.
El Congreso del Estado de Chihuahua anunció que solicitará comparecencias tanto de funcionarios de la Fiscalía como de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coespris).
¿Qué sigue?
La Fiscalía General del Estado ha señalado que se informará progresivamente a medida que avancen las diligencias. Por ahora, las prioridades son:
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Determinar si todos los cuerpos están identificados.
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Establecer un cronograma de recepción y documentación de los cadáveres.
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Investigar a los responsables del crematorio.
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Citar a declarar a funerarias que contrataron el servicio.
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Establecer si hubo delitos contra la salud pública.
Se ha solicitado paciencia a la ciudadanía, pero también se ha abierto una línea directa para que las familias que sospechen haber sido víctimas de este caso puedan verificar con las autoridades.
Conclusión
El hallazgo de 383 cuerpos en un crematorio en Ciudad Juárez ha revelado una posible red de negligencia y fraude funerario sin precedentes en el estado de Chihuahua. Mientras avanza la investigación, cientos de familias esperan respuestas y justicia por un caso que ha puesto en evidencia graves omisiones legales y éticas en el tratamiento de los cuerpos de personas fallecidas.