Otro escándalo fúnebre sacude Ciudad Juárez: restos de una recién nacida fueron ocultados tras falsa cremación
CIUDAD JUÁREZ | El caso de la Funeraria Del Carmen ha tomado un giro aún más macabro y desgarrador, luego de que autoridades confirmaran que uno de los tres cuerpos hallados el pasado 24 de julio en una carroza abandonada perteneciente al establecimiento, correspondía a una bebé de apenas 9 días de nacida, entregada por su familia para ser velada y cremada, pero cuyo destino fue el abandono absoluto.
Engaño cruel a una familia en duelo
Los padres de la menor, quienes han decidido no revelar su identidad, señalaron que confiaron en que la funeraria cumpliría con el proceso de despedida y cremación, sin imaginar que el cuerpo de su hija permanecería oculto por más de un mes dentro de un vehículo funerario asegurado.
La verdad salió a la luz gracias a pruebas genéticas forenses, que permitieron identificar a la bebé entre los cadáveres encontrados. La familia finalmente pudo darle sepultura tras semanas de incertidumbre y engaño.
Cateo revela más horrores
Durante un operativo judicial realizado en el domicilio del propietario de la funeraria, ubicado en la colonia Arroyo Colorado, se localizaron otros dos cuerpos, uno de otro menor y otro de un adulto, ambos dentro de un ataúd y sin haber recibido ningún tratamiento funerario.
Estos hallazgos forman parte de una investigación en curso que vincula a la Funeraria del Carmen con una red de funerarias implicadas en manejo indebido de cuerpos, entre ellas el espeluznante caso del crematorio Plenitud, donde se hallaron más de 300 cadáveres sin cremar en condiciones insalubres.
¿Qué pasa con el dueño de la Funeraria Del Carmen?
El dueño del establecimiento permanece en libertad gracias a un amparo, aunque ya fue vinculado a proceso penal. Su nombre figura dentro de una red de al menos seis funerarias investigadas, lo que sugiere la existencia de un sistema de negligencia criminal en el sector funerario.
La Fiscalía General del Estado mantiene abierta la carpeta de investigación, con un plazo de cierre de dos meses, mientras organizaciones ciudadanas y familiares de otras víctimas exigen justicia, transparencia y la clausura inmediata de todas las funerarias implicadas.