Una pareja y un grupo de mujeres acudieron en distintos horarios al Hospital de la Familia para entregar alimentos y agua a quienes más lo necesitan.
Un gesto solidario que reconforta en momentos difíciles
Una muestra de solidaridad conmovió a la comunidad juarense luego de que ciudadanos acudieran al Hospital de la Familia (FEMAP) para repartir burritos, sodas y agua a pacientes y familiares que permanecen en el lugar.
De acuerdo con el reporte ciudadano, una pareja a bordo de una troca y un grupo de damas que viajaban en una camioneta blanca llegaron en diferentes horarios para realizar la entrega de alimentos, brindando apoyo a quienes atraviesan largas horas de espera y preocupación en el hospital.
Reparto en distintos horarios para llegar a más personas
Las personas solidarias no acudieron en un solo momento del día, sino que regresaron en distintos horarios, con el objetivo de alcanzar a más beneficiarios. Esta dinámica permitió que tanto pacientes como acompañantes recibieran alimento y bebida, especialmente durante la noche, cuando el cansancio y la incertidumbre suelen ser mayores.
Testigos señalaron que los alimentos fueron entregados de manera ordenada y respetuosa, priorizando a quienes se encontraban afuera del hospital y a familiares que aguardaban noticias de sus seres queridos.
La fuerza de la comunidad juarense
Este tipo de acciones reflejan el espíritu solidario que caracteriza a las familias de Ciudad Juárez, donde ciudadanos se organizan de manera espontánea para ayudar a quienes atraviesan situaciones complicadas, sin esperar reconocimiento ni retribución.
Usuarios en redes sociales destacaron la importancia de estas iniciativas, señalando que pequeños actos como compartir alimento pueden marcar una gran diferencia en momentos de angustia.
Reconocimiento a quienes ayudan sin reflectores
La entrega de burritos y bebidas en el FEMAP fue ampliamente reconocida por la comunidad, que agradeció el gesto y envió mensajes de bendición a las familias involucradas. Acciones como esta demuestran que la empatía y la unión siguen presentes en la ciudad, incluso en tiempos difíciles.