“Estaba bien”: Luiza Banulescu fallece tras dar a luz en medio de presunta negligencia médica en Rumania
RUMANIA.– La historia de Luiza Banulescu, una joven madre de 24 años, ha conmovido a miles en Europa y redes sociales luego de que falleciera horas después de dar a luz mediante cesárea, tras alcanzar a tomarse una última foto con su bebé recién nacida. Su familia denuncia que hubo negligencia médica por parte del hospital y una cadena de errores que impidió salvarle la vida.
El caso ocurrió en el hospital de Rosia de Amaradia, donde Luiza fue internada para recibir a su tercer hijo. Todo parecía estar bajo control. Sin embargo, poco después del procedimiento quirúrgico, la joven comenzó a presentar signos de hemorragia interna masiva que derivaron en un estado crítico.
Una foto, un adiós: sus últimas horas de vida
Tras el nacimiento, Luiza se tomó una foto con su bebé en brazos, aparentemente tranquila. Horas después, su salud se desplomó repentinamente. El personal médico intentó estabilizarla en quirófano, pero el sangrado fue severo. La urgencia de un traslado a una clínica más especializada se volvió vital, pero una tormenta impidió el uso de helicóptero, lo que provocó que se perdiera tiempo valioso en el intento de llevarla por carretera.
Caos en el traslado y hospitales que no la recibieron
La situación fue agravándose cuando, según la familia, el médico de guardia no se encontraba disponible, por lo que se tuvo que llamar a otro profesional desde su casa, lo cual tomó más de una hora.
Ya en el traslado terrestre, el primer hospital no quiso recibirla por falta de preparación, y en el segundo ya no pudieron hacer nada. Luiza murió sin recibir atención oportuna, según denuncia su familia.
Familia exige justicia y señala negligencia
Los padres y familiares de Luiza aseguran que el mal manejo de la emergencia obstétrica fue determinante. Anunciaron que presentarán una denuncia formal contra el hospital por presunta negligencia médica y omisión de protocolos de emergencia, ya que consideran que su hija tenía todas las posibilidades de sobrevivir si se hubiera actuado a tiempo.
“Ella estaba bien, joven, fuerte. Solo queríamos abrazar a nuestra nueva nieta con ella, no enterrarla”, lamentó la madre de Luiza.
Este caso ha abierto nuevamente el debate en Rumania y otras partes de Europa sobre la falta de protocolos efectivos en emergencias obstétricas, y la necesidad urgente de revisar la disponibilidad de recursos como ambulancias aéreas y personal capacitado 24/7 en hospitales regionales.
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