Ciudad de México.– El senador Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, afirmó este miércoles que no renunciará a su cargo, pese a las fuertes críticas que ha recibido en los últimos días por parte de colectivos de víctimas, activistas de derechos humanos y legisladores de oposición.
Desde la tribuna de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el legislador morenista sostuvo su posición con firmeza:
“Seré su presidente de la Permanente y de la Cámara de Senadores hasta el 31 de agosto de este año, les pese lo que les pese, y les duela lo que les duela.”
La declaración se da luego de una creciente presión social y política que exige su dimisión, a raíz de sus polémicas declaraciones en torno a temas sensibles como la violencia en México, las personas desaparecidas y la relación con Estados Unidos.
Acusaciones de insensibilidad hacia víctimas
El día anterior, organizaciones de familiares de personas desaparecidas emitieron un comunicado en el que calificaron la actitud de Fernández Noroña como insensible y ofensiva, señalando que ha revictimizado a más de 128 mil personas desaparecidas en México. El documento menciona que sus declaraciones evidencian un “desprecio hacia el dolor ajeno” y una desconexión total con el sufrimiento de las comunidades afectadas.
Los reclamos no solo han venido de víctimas, sino también de colectivos de derechos humanos, quienes enviaron una carta a la presidenta electa Claudia Sheinbaum, solicitando su intervención para destituir al senador.
“Sus constantes declaraciones, cargadas de insensibilidad y arrogancia, han herido profundamente a las víctimas de la violencia en México”, señala la misiva firmada por más de 30 organizaciones.
Críticas por tensar relación con EE.UU.
La polémica también ha escalado al plano internacional. La senadora panista Lilly Téllez acusó a Fernández Noroña de dañar la relación bilateral con Estados Unidos, especialmente luego de sus recientes declaraciones en contra del senador republicano Eric Schmitt, con quien ha confrontado públicamente por el tema del impuesto a las remesas.
“Fernández Noroña parece un perro sin bozal que muerde a los de casa”, dijo Téllez, añadiendo que su permanencia en el cargo representa un riesgo para los intereses de migrantes mexicanos en EE.UU.
La legisladora pidió a Sheinbaum actuar con responsabilidad e institucionalidad para preservar los vínculos diplomáticos y el respeto a los mexicanos en el exterior.
Mantiene su postura hasta el fin de su gestión
Pese a las múltiples exigencias, Fernández Noroña no ha mostrado intención de dejar el cargo antes del 31 de agosto de 2025, fecha en que concluye su periodo como presidente del Senado. Ha calificado las críticas como “ataques políticos disfrazados de moralismo”.
Por ahora, Morena no ha emitido una postura oficial sobre el futuro de Noroña en la Cámara Alta, aunque voces dentro del propio partido han señalado que sus expresiones “no representan al movimiento en su conjunto”.