Puerto Rico.– El mundo del género urbano está de luto. El pasado 13 de junio de 2025 se confirmó el fallecimiento del cantante Ricardo José Cruz Mateos, mejor conocido como Marvel Boy, a los 33 años de edad. De acuerdo con medios locales y declaraciones oficiales, la causa habría sido un paro cardiorrespiratorio, aunque también circulan versiones que apuntan a una posible sobredosis.
La noticia fue confirmada por su disquera Glad Empire a través de un emotivo comunicado publicado en redes sociales. En él recordaron el primer contacto que tuvieron con Ricardo en noviembre de 2018:
“Tenía carisma, era genuino, ingenuo en el buen sentido. Decía las cosas de una manera única y su flow era de él”, relataron.
En tanto, Paradise Agency, promotora de eventos del artista, también lamentó la pérdida:
“Les comunicamos que lamentablemente una de las grandes leyendas del reguetón ha partido”, se lee en la publicación oficial donde también informaron la cancelación de sus próximos conciertos.
Marvel Boy: una voz que comenzó en el freestyle
Ricardo Cruz, nacido el 24 de abril de 1992 en Río Piedras, Puerto Rico, comenzó su carrera musical en 2018, destacando en el freestyle urbano. Su primer contacto con el público se dio en Houston, interpretando temas como “Seguroski” y “Pa que se lo gozen”. Rápidamente se ganó un lugar en la escena musical gracias a su estilo único y su carisma.
Posteriormente, Marvel Boy incursionó con temas propios, como “Nou, Nou, Nou” y “A Todas Horas”, logrando popularidad en las plataformas digitales. Además, colaboró con importantes figuras del género como Miky Woodz, Marconi Impara, Alex Rose, Juanka “El Problemático” y Jon Z.
Un legado más allá de la música
Marvel Boy era padre de dos hijos pequeños. Su disquera destacó que el cantante siempre hablaba con orgullo de ellos:
“Amaba a sus hijos. Marvel dejó dos seres humanos hermosos que él siempre decía que iban a ser mejores versiones de él”, señalaron.
Aunque su carrera estuvo marcada también por altibajos, incluyendo problemas legales por el consumo de sustancias nocivas, quienes lo conocieron lo recuerdan como un hombre humilde, soñador y apasionado por la música.
“Marvel no era perfecto… pero no era una mala persona. Era un chamaco que soñaba con ser grande, con subirse a una tarima y con que la gente cantara sus canciones”, concluye el mensaje de despedida de Glad Empire.
En honor a su memoria, seguidores han comenzado a organizar un homenaje póstumo en plataformas musicales y redes sociales. Su voz, aseguran, seguirá viva en cada pista que dejó grabada.