Ciudad de México.– Edwin Luna, vocalista de La Trakalosa de Monterrey, sorprendió a sus seguidores al revelar los procedimientos estéticos a los que se sometió recientemente, desatando una ola de comentarios divididos en redes sociales.
Ante las críticas por su cambio de apariencia, el cantante no tardó en responder firmemente a sus detractores, defendiendo su decisión de mejorar su imagen como un acto de seguridad personal y no de inseguridad, como algunos usuarios sugirieron.
Edwin Luna habla sobre su transformación estética
En entrevista para el programa “De Primera Mano”, Edwin Luna expresó:
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Que sus procedimientos buscan reforzar su bienestar físico y autoestima,
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Y negó que se trate de una falta de seguridad.
“Me decían hace poco, es que los hombres que se hacen un procedimiento son inseguros. Yo lo veo de otra manera. Yo veo que cuando ya tienes la seguridad y la certeza de quién eres tú, te atreves a hacer ese tipo de cosas porque no te importa el qué dirán”, comentó.
Además, el cantante indicó que actualmente se encuentra en uno de los mejores momentos de su vida, cuidando no solo su apariencia, sino también su salud a través de una buena alimentación y ejercicio regular.
¿Qué procedimientos se realizó Edwin Luna?
El artista ha sido transparente sobre las intervenciones estéticas a las que se ha sometido, detallando que:
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Se realizó un injerto de cabello,
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Y una armonización facial para mejorar la simetría de su rostro.
Sobre su proceso, Luna declaró: “Yo me injerté cabello, me creció bastante, me hicieron la armonización facial y es todo”.
Reacciones en redes sociales
La revelación de su transformación provocó múltiples reacciones:
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“Muy bien, se ve muy joven, pero muy natural”, comentaron algunos usuarios,
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Mientras otros señalaron: “Se le ve la cara más de mujer, pero no importa, si tiene el dinero, que lo gaste en lo que quiera”,
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También recibió mensajes de apoyo como: “Tú muy bien Edwin, hazte lo que quieras”.
A pesar de la polémica, el cantante dejó claro que su prioridad es ser feliz consigo mismo y no vivir condicionado por las opiniones ajenas.
