Padre de Jasiel Giovanny clama justicia por el asesinato de su hijo: “Tu muerte no se va a quedar así”
CHIHUAHUA.– La tragedia que arrebató la vida de Jasiel Giovanny, un niño de apenas 8 años, sigue estremeciendo a la comunidad chihuahuense. Esta semana, su padre biológico, Jasiel Castellano, rompió el silencio con un mensaje desgarrador en redes sociales, donde prometió que el crimen contra su hijo no quedará impune.
Acompañado por una fotografía del pequeño Jasiel comiendo un elote con la cara llena de crema frente a la Catedral de Chihuahua, Castellano escribió un mensaje que ha conmovido al país:
“Te voy a extrañar mijo, y demasiado. Te arrebataron la vida de una forma muy cobarde, pero eso no se queda así… la persona que te hizo eso lo va a pagar, y peor. De eso me voy a encargar. Tu muerte no se va a quedar así.”
La comunidad exige justicia
Desde que se conoció el asesinato de Jasiel Giovanny, las muestras de solidaridad y exigencia de justicia no han cesado. Usuarios en redes sociales y organizaciones civiles han utilizado su historia como símbolo de la lucha contra la violencia infantil y la impunidad.
Mensajes con frases como “Ni un niño más”, “Justicia para Jasiel” y “Los niños merecen vivir sin miedo” se multiplican cada día, al tiempo que crece la indignación social por la brutalidad del crimen.
El presunto responsable, en espera de audiencia
El principal sospechoso del homicidio, identificado como Abraham Alejandro F. D., permanece en prisión preventiva bajo vigilancia especial, en una zona aislada del penal, según confirmó la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE). Esto, tras rumores sobre una supuesta agresión dentro del centro penitenciario.
La audiencia de vinculación a proceso ha sido programada para este 10 de julio, y será clave en el avance del caso. El Ministerio Público asegura contar con pruebas sólidas para sostener los cargos por delitos de extrema gravedad, mientras que la defensa del imputado insistirá en la presunción de inocencia.
Una imagen que duele
La fotografía de Jasiel, sonriente e inocente, ha recorrido miles de perfiles, noticieros y grupos comunitarios. Para su familia, es un recuerdo imborrable que hoy se ha convertido en símbolo del dolor y la exigencia de justicia.
“Ese elote lleno de crema es ahora lo único que me queda para recordarte feliz”, escribió un familiar.
El caso de Jasiel ha encendido la discusión pública sobre la protección de menores, la justicia lenta y la necesidad de reformas legales que garanticen castigos ejemplares a quienes atenten contra la niñez.
