Filicidio en Parral: padre envenena a sus dos hijas y se quita la vida; madre recibió última foto horas antes
PARRAL, CHIHUAHUA — Vestidas de azul, con coletas y sentadas en el asiento trasero de un Nissan Versa blanco. Así quedaron inmortalizadas Génesis Nahomy (7) y Yeily Valeria (5) en la última fotografía que su madre recibió de ellas antes de que fueran encontradas sin vida junto a su padre, Jesús Omar, quien presuntamente las envenenó y luego se suicidó.
El caso ha causado conmoción nacional, no solo por la brutalidad del crimen, sino por la manera en que se desarrollaron los hechos: la madre había ganado recientemente la custodia legal de sus hijas, pero el padre aún las tenía consigo. Horas después de la desaparición, recibió esa imagen como la última “señal de vida”.
El mensaje antes del silencio
Luego de notar la falta de contacto con Jesús Omar y sin saber el paradero de las menores, la madre acudió a la Fiscalía de Distrito Zona Sur para denunciar su desaparición. Poco después, recibió vía mensaje una fotografía inquietante: sus dos hijas sentadas tranquilamente en el auto, sin saber que sería su despedida silenciosa.
Al día siguiente, elementos de la Agencia Estatal de Investigación localizaron el vehículo abandonado cerca de la presa Parral. Dentro del automóvil estaban los tres cuerpos sin vida: Jesús al volante, y las niñas en el asiento trasero, tal como en la imagen enviada a su madre.
Confirmación del horror
La madre fue llamada para identificar los cuerpos. La unidad coincidía con la del mensaje, y el hombre al volante era, efectivamente, su expareja y padre de las niñas. Los peritos forenses determinaron que los tres habían ingerido una sustancia tóxica, compatible con un acto premeditado de filicidio-suicidio.
Disputa por custodia: el detonante del crimen
Las autoridades confirmaron que la madre había obtenido la custodia legal de las menores tras un litigio familiar reciente. Esta situación habría detonado una reacción extrema por parte del padre, quien prefirió arrebatar la vida a sus hijas antes de entregarlas.
La Fiscalía General del Estado mantiene abierta la investigación para determinar con exactitud la sustancia usada, así como el momento en que ocurrió el envenenamiento.
Un caso más de violencia familiar con víctimas inocentes
El caso de Génesis y Yeily se suma a una alarmante tendencia de violencia familiar en México. Según cifras del INEGI, cada año se registran cientos de casos fatales por disputas familiares, muchos de ellos relacionados con custodias, separaciones conflictivas o abuso psicológico.
Especialistas en derechos de la niñez y organizaciones civiles han vuelto a exigir protocolos más estrictos de protección infantil, así como atención psicológica obligatoria en casos judiciales de custodia para prevenir tragedias similares.
