El hijo de la leyenda del boxeo enfrenta proceso en México por presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa
HERMOSILLO, SONORA — El boxeador Julio César Chávez Jr., hijo del histórico campeón mexicano Julio César Chávez, ingresó al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) en Hermosillo tras ser deportado desde Estados Unidos, donde permaneció poco más de un mes en un centro de reclusión del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
De acuerdo con una ficha del Registro Nacional de Detenciones (RND), Chávez Jr. fue trasladado a México bajo custodia de agentes de la Fiscalía General de la República (FGR), quienes lo entregaron de inmediato al penal de máxima seguridad. Se prevé que en los próximos días sea presentado ante el juez que lleva su caso.
Acusaciones y proceso judicial
El excampeón mundial de peso medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) enfrenta señalamientos por presuntas operaciones ligadas al Cártel de Sinaloa, acusaciones que han marcado su nombre en los últimos meses y derivaron en su detención en territorio estadounidense.
Fuentes cercanas a la familia confirmaron que se han promovido amparos legales con el objetivo de frenar acciones judiciales y garantizar el respeto a los derechos del pugilista. No obstante, hasta ahora ni la defensa ni la familia Chávez han emitido un comunicado oficial.
Una carrera marcada por altibajos
Considerado uno de los pugilistas más mediáticos de la última década, Chávez Jr. logró en 2011 el campeonato mundial medio del CMB, convirtiéndose junto a su padre en una de las pocas duplas mexicanas padre e hijo en ser campeones mundiales absolutos.
Sin embargo, su carrera deportiva se ha visto afectada por problemas personales, legales y constantes polémicas fuera del ring. Su última aparición como boxeador ocurrió el pasado 28 de junio en Anaheim, California, cuando perdió por decisión unánime frente al youtuber y peleador Jake Paul.
El regreso de Chávez Jr. a México bajo proceso judicial representa un nuevo episodio en su vida, siempre bajo la mirada pública, y que ahora lo enfrenta a uno de los retos más complejos: responder a la justicia mexicana.