El creador de “El Chavo del 8” no solo pidió perdón, también le dejó una fortuna como compensación
Ciudad de México.— El legado del comediante Roberto Gómez Bolaños, “Chespirito”, ha vuelto a la conversación pública tras el estreno de la serie “Chespirito: Sin querer queriendo”. Uno de los aspectos que más ha llamado la atención entre los seguidores del ícono del humor latinoamericano es lo que decidió dejarle a su primera esposa, Graciela Fernández, tras su separación.
Aunque su relación con Florinda Meza inició en la década de 1970, el divorcio legal con Graciela no se concretó sino hasta 1989, más de una década después de haber iniciado su nueva vida en pareja.
Un divorcio con remordimientos
En su autobiografía, Chespirito confesó haber sentido culpa y remordimiento por la manera en que terminó su relación con Graciela, madre de sus seis hijos. Como parte de una reconciliación emocional, Gómez Bolaños decidió dejarle una gran parte de su patrimonio como compensación.
“Fue una decisión razonable”, escribió el propio Roberto en sus memorias.
¿Qué le dejó Chespirito a Graciela Fernández?
Según su propio testimonio, Graciela recibió lo siguiente:
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Las casas que construyeron juntos durante el matrimonio
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Varios terrenos
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Una colección de monedas de oro (centenarios)
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Los muebles del hogar
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Su mejor automóvil de la época
Estas decisiones no surgieron de un mandato judicial, sino por voluntad propia de Gómez Bolaños, quien también reconoció que separarse fue uno de los episodios más difíciles de su vida.
Un amor de juventud que duró más de 20 años
Chespirito conoció a Graciela Fernández cuando ella tenía casi 15 años y él 22. Se casaron poco tiempo después y compartieron más de dos décadas de vida, durante las cuales Roberto comenzaba a construir su carrera como creativo y comediante.
La historia entre ambos concluyó oficialmente en 1989, aunque la distancia sentimental había iniciado mucho antes. Fue hasta el 2004 que Chespirito contrajo matrimonio con Florinda Meza, su compañera dentro y fuera de escena desde los tiempos de “El Chavo del 8” y “El Chapulín Colorado”.