Samuel y Alberto desaparecieron tras acudir al taller a exigir justicia; sus cuerpos fueron hallados en un cañaveral
COATEPEC, VERACRUZ – Tras casi cuatro meses de investigaciones, las autoridades veracruzanas detuvieron a dos mecánicos acusados de asesinar brutalmente a dos hombres de la tercera edad, quienes simplemente acudieron a su taller para reclamar anomalías en una reparación vehicular. El crimen ocurrió en marzo de este año en el municipio de Coatepec, y sacudió a la comunidad por su crueldad.
El reclamo que terminó en tragedia
Las víctimas fueron identificadas como Samuel Limón Salas, de 74 años, y Alberto Manuel Vargas Martínez, de 70. Ambos fueron vistos por última vez el 12 de marzo, cuando se dirigieron al taller mecánico ubicado sobre la calle Rivera de Cuauhtémoc, en el centro de Coatepec, para exigir que se resolvieran las fallas de un automóvil que habían llevado días antes.
Sin embargo, luego de ese reclamo nunca más se supo de ellos. Sus familiares los reportaron como desaparecidos, y una semana después, el 19 de marzo, sus cuerpos sin vida fueron localizados entre los cañales de la localidad de Tuzamapan, en una zona alejada y de difícil acceso.
Los responsables: mecánicos del mismo taller
Las investigaciones de la Policía Ministerial apuntaron rápidamente a los empleados del taller como principales sospechosos, luego de determinar que Samuel y Alberto habían tenido una discusión con los encargados antes de desaparecer.
Los ahora detenidos son:
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Rodolfo Eligio “N”, de 36 años
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Salvador “N”, de 49 años, propietario del taller mecánico donde ocurrió la última interacción con las víctimas
Ambos fueron capturados la noche del miércoles 16 de julio y trasladados al penal de Pacho Viejo, donde quedaron a disposición de un juez de control. En las próximas horas se determinará su situación legal.
Un crimen que indigna a todo Coatepec
El caso ha causado conmoción en la comunidad, particularmente porque las víctimas eran conocidas por su amistad de muchos años y su trato respetuoso. Vecinos de Coatepec y Tuzamapan han exigido justicia ejemplar para los responsables, y calificaron el doble asesinato como una muestra de brutalidad e impunidad imperdonable.
Colectivos ciudadanos y familiares piden a las autoridades mayor vigilancia en los negocios y seguimiento a denuncias sobre desapariciones, para evitar que hechos similares se repitan.