Filipinas.– Una foto capturada por casualidad cambió por completo la vida de Rose, una mujer filipina que sobrevivía recogiendo basura reciclable en las calles de Makati, el distrito financiero de Filipinas. La imagen, que la mostraba saliendo de una coladera, se volvió viral en redes sociales y atrajo la atención de miles de personas, incluidas las autoridades del país.
La imagen que lo cambió todo
El fotógrafo aficionado William Roberts fue quien captó la escena mientras caminaba por la zona. Publicó la imagen en Instagram y Reddit, preguntándose si se trataba de una persona que vivía bajo tierra. Aunque en realidad, Rose había entrado a la coladera solo para recuperar una cuchilla de corte, herramienta que usa para recolectar materiales reciclables.
Pese a no vivir en el sistema de drenaje, Rose sí pasó un año durmiendo en las calles de Makati, mientras ahorraba lo suficiente para poder rentar un lugar donde vivir.
De la calle a tener su propio negocio
La imagen se viralizó rápidamente, provocando que el Departamento de Bienestar Social y Desarrollo de Filipinas la buscara para ofrecerle ayuda. Tras conocer su historia, las autoridades decidieron apoyarla con un fondo de 1,265 euros (aproximadamente 27,788 pesos mexicanos) para que pudiera abrir un negocio propio.
Rose cumplirá su sueño de tener una tienda “sari-sari”, un tipo de negocio familiar que vende productos básicos como alimentos y artículos de limpieza, muy comunes en los barrios de Filipinas.
Una historia que refleja la desigualdad
El caso de Rose ha generado un profundo impacto en la opinión pública. En Filipinas, más de 17.5 millones de personas vivían en situación de pobreza en 2023, y el ingreso mensual promedio en 2022 era de apenas 291 euros (alrededor de 6,392 pesos mexicanos).
La historia de Rose no solo visibiliza la precariedad que viven millones de personas, sino que también demuestra el poder transformador de la empatía y la exposición pública, cuando se canalizan para bien.
