Washington D.C.— El gobierno de Estados Unidos puede cancelar cualquier tipo de visa, en cualquier momento y sin necesidad de justificar públicamente la decisión. Así lo establece la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), que otorga al Departamento de Estado amplias facultades para negar, suspender o revocar visas por razones tan variadas como preocupaciones de seguridad, información incompleta, vínculos con actividades ilícitas o simplemente por el interés público.
Este fin de semana, el caso de la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, y su esposo, Carlos Torres, puso el tema en la agenda. Ambos confirmaron que fueron notificados por autoridades consulares de que sus visas de no inmigrante fueron revocadas. Aunque no se les acusa de ningún delito, ni se ha hecho pública una causa específica, la ley estadounidense no exige explicar el motivo.
¿En qué casos se puede revocar una visa?
Según la INA y el Código de Regulaciones Federales (8 CFR), estas son las razones más comunes:
1. Información falsa o incompleta
Si se descubre que una visa fue obtenida con documentos falsos, información incorrecta u omisiones relevantes, puede ser anulada de inmediato.
2. Cambio en las circunstancias del solicitante
Por ejemplo: antecedentes penales nuevos, participación en actividades sospechosas, o pérdida de la elegibilidad bajo la categoría de visa otorgada.
3. Interés público o seguridad nacional
El Departamento de Estado puede cancelar visas sin juicio ni defensa si considera que la presencia de una persona es “inconveniente” para los intereses de EE. UU.
4. Decisión consular discrecional
Un oficial consular puede revocar la visa si determina que fue concedida por error o si hay nueva información, sin necesidad de explicar ni permitir apelación.
5. Investigaciones en curso
Estar involucrado o mencionado en una investigación, aunque no haya cargos formales, también puede motivar la cancelación preventiva de una visa.
¿Qué derechos tiene el afectado?
Prácticamente ninguno. No hay proceso judicial, ni derecho a apelar. Las decisiones suelen ser unilaterales, confidenciales y definitivas. En muchos casos, ni siquiera se notifica con antelación al afectado, quien se entera al intentar ingresar al país o renovar su estatus migratorio.
Reacciones en México
La presidenta Claudia Sheinbaum fue cuestionada sobre el caso de Marina del Pilar, a lo que respondió que el Gobierno de México “no tiene ninguna notificación oficial” de Estados Unidos. La gobernadora, por su parte, aseguró que confía en que el tema “se aclarará satisfactoriamente”.