Ciudad de México.– En un acto de profundo amor por México, la cantante Denisse de Kalafe anunció que donó oficialmente la partitura de su emblemática canción “Señora, Señora” a los organilleros del país, para que puedan interpretarla en las calles y plazas públicas.
Durante una rueda de prensa realizada este martes en la Ciudad de México, la artista nacionalizada mexicana declaró que esta acción representa una forma de agradecer a la nación que la acogió y que ha hecho de su música un símbolo entrañable, especialmente en fechas como el Día de las Madres.
“Este país me hace llorar. Es una gran emoción porque yo quise regalar a los organilleros de México la partitura de Señora, Señora, porque ellos son el alma que humanizan las calles”, expresó conmovida.
Un himno popular que ahora sonará en las calles
La canción Señora, Señora se ha convertido en un himno en toda América Latina, especialmente en homenajes a las madres. Su emotiva letra ha sido motivo de lágrimas, abrazos y recuerdos en millones de hogares. Ahora, gracias a esta donación, los organilleros de México podrán incluirla en su repertorio y compartir su melodía con los transeúntes en espacios públicos.
El gesto fue recibido con entusiasmo por los propios organilleros, quienes desde hace años luchan por mantener viva una de las tradiciones musicales más antiguas y queridas del país.
Rescate de una tradición mexicana
Además de su simbolismo emocional, la donación pone sobre la mesa la relevancia de preservar oficios tradicionales como el del organillero. Estos músicos callejeros son parte del paisaje urbano y cultural de ciudades como Ciudad de México, Puebla o Guadalajara, y su presencia remite a una época donde la música se compartía sin necesidad de plataformas digitales.
Denisse de Kalafe destacó que con este acto no solo rinde tributo a las madres mexicanas, sino también a quienes llevan música y nostalgia a las calles, ayudando a mantener vivas las costumbres que forman parte de la identidad nacional.
Reacciones positivas y reconocimiento social
El gesto fue ampliamente aplaudido en redes sociales, donde usuarios reconocieron a la intérprete como una figura comprometida con las raíces populares de México. “Qué hermoso regalo para nuestras madres y para los organilleros que alegran nuestras calles”, escribió una usuaria en Facebook.
Mientras tanto, asociaciones culturales y defensores del patrimonio urbano agradecieron el gesto, destacando su valor simbólico y su posible impacto en la revitalización de esta tradición.