La noche del lunes, Jessica Domínguez y su hijo emprendieron su habitual trayecto hacia el ejido Libertad en Cunduacán, Tabasco, abordando un autobús de la línea TRT. Sin embargo, lo que parecía ser un viaje común pronto se convirtió en una pesadilla.
En la ruta hacia su destino, el autobús fue interceptado por un grupo delictivo conocido como “La Barredora”, desencadenando un violento enfrentamiento en la localidad de Santa Rosa.
Este acto de violencia se atribuye a un operativo de seguridad llamado “Tabasco Seguro” en el poblado C-21, que desencadenó represalias por parte de los sicarios, de acuerdo a información de La Jornada.
Acto de valentía
A medida que las llamas devoraban el autobús con pasajeros a bordo, Jessica se vio atrapada junto a su hijo dentro del vehículo en llamas. Ante la desesperación y la imposibilidad de salir por la puerta, tomó la valiente decisión de lanzar a su hijo de 11 años por una ventana para salvarlo del fuego.
A pesar de su acto heroico, Jessica no logró sobrevivir al incendio..
Consecuencias del ataque
El niño resultó herido con una fractura en un brazo, pero fue rescatado por personas presentes en el lugar, quienes lo auxiliaron y lo llevaron con sus familiares para recibir atención médica adicional.
La familia de Jessica, así como la comunidad local y la iglesia adventista a la que pertenecía, lamentan profundamente su pérdida y exigen justicia para los responsables de este acto de violencia sin sentido.
Las autoridades locales han iniciado una investigación para identificar y capturar a los responsables del ataque al autobús, que cobró la vida de Jessica y puso en peligro la de muchos otros pasajeros.
Cuatro presuntos delincuentes fueron detenidos en la zona, donde dos más resultaron abatidos, entre ellos el líder de la zona Luciano «N», mejor conocido como «El Topo».
El acto de valentía de Jessica ha sido ampliamente difundido en redes sociales, generando conmoción y admiración por su sacrificio para salvar a su hijo en medio del caos y la violencia.
La Fiscalía General del Estado de Tabasco y el Servicio Médico Forense local están llevando a cabo las pruebas genéticas necesarias para identificar el cuerpo de Jessica y entregarlo a sus familiares para su sepultura.
La familia de Jessica espera que los responsables de este acto de violencia sean identificados y llevados ante la justicia, para que se haga prevalecer el estado de derecho y se eviten tragedias similares en el futuro.
El Imparcial Noticias