Adrián Di Monte decidió contar su versión de los hechos, luego de que su expareja Sandra Itzel denunciara a través de las redes sociales que el actor llegó a su domicilio sin su autorización y teme por su vida porque el cubano porta armas de fuego.
En entrevista para el programa Venga la Alegría, Di Monte descartó ser un peligro para la actriz mexicana y aprovechó las cámaras para pedirle a Sandra que firme el divorcio lo más pronto posible.
“La primera vez que se trató de notificar dijeron en recepción: ‘aquí no vive ninguna Sandra Itzel’, vamos a decirle al juez que nos dé permiso, para que tú acompañes a la actuaria. Entonces nosotros estamos del lado de la ley, lo que pasa es que a ella le molestó que finalmente se le notificara, porque ella quería seguir con todo este circo”, contó Adrián.
Sobre los señalamientos de que es un hombre violento y posee armas, el artista de 33 años replicó:
“No había verdad en tu llanto Sandra, ridícula se ve la expresión de que ‘tengo miedo por mi vida porque Adrián me va a hacer algo’, ¡por favor! Primero que todo, el hecho de que a mí me guste el tiro al blanco, que me guste disparar por recreación, cuando me he llevado a su hermano, mi excuñado Emiliano se ha ido conmigo a disparar al rancho”.
Visiblemente incómodo por la situación, Di Monte subrayó: “Lo que le pido a Sandra nada más es: ‘por favor, Sandra, firma el divorcio, es lo único que te pido, firma el divorcio y déjame ser feliz. Procede legalmente, demándame, acúsame de violencia familiar y muestra tus pruebas’”.
Finalmente, el intérprete aseguró que Sandra Itzel no cree en el discurso feminista de su ex, e hizo un llamado a las mujeres que defienden esta causa.
“Se está agarrando de un movimiento muy serio, en donde sí mujeres sufren, el movimiento feminista, y es una lobo con una careta de oveja, no dejen que mujeres como Sandra, utilicen su nombre, utilicen su dolor”, concluyó.